Hace un tiempo, mi colega Mey me preguntó mi
opinión sobre los bootcamps de programación, esos cursos que te prometen en
unos pocos meses enseñarte todo lo necesario para incorporarte en el mercado
laboral, e incluso algunos te garantizan empleo.
En su día le respondí con mi opinión a Mey por privado, pero a raíz de un
reciente tweet de
Ana,
he decidido que sería buena idea hacer pública mi opinión completa sobre ello.
⚠ Warning
Yo nunca he cursado un bootcamp de programación, lo que sé de ellos es lo que he
visto de temario desde fuera, y lo he podido hablar con algunas personas que sí
lo han cursado. A raíz de ello, es posible que la información que haya en este
post pueda ser inexacta. También hay que tener en cuenta que no todos los
bootcamps son iguales, y esto puede aplicarse a cada uno en mayor o menor
medida.
Todo lo que expongo en esta entrada es opinión y debe de tratarse como tal. No
soy un portador de la verdad y estoy abierto a debate en los comentarios.
¿Qué es un bootcamp?
Aunque no hay una definición exacta, para esta entrada vamos a entenderlo como
un programa de formación intensivo, de una duración de menos de un año
(generalmente, de tres a seis meses) de forma práctica. La idea detrás del
bootcamp es “nos saltamos la parte más teórica y aburrida y vamos directamente a
enseñarte las tecnologías que piden las empresas”.
¿Cómo se articulan los bootcamps?
La mayor parte de los bootcamps a los que les he echado el ojo, prometen
enseñar desarrollo web en menos de un año. Generalmente dedicando un mes a
aprender HTML, CSS y JavaScript (muy superficialmente), y el resto a enseñar
alguna tecnología como React o Angular (también superficialmente). También he
visto otros orientados a Machine Learning o desarrollo móvil, con una estructura
de aprendizaje similar.
Después de ello, te meten en una bolsa de trabajo de empresas que trabajan con
la tecnología cursada y que muchas veces suelen contratarte.
¿Cuál es mi opinión?
Mala. Mi opinión sobre los bootcamps, es mala. Vamos a entrar más en detalle
sobre ello.
Primero, aprender requiere
tiempo. Es imposible
profundizar en las bases de lo que se está enseñando en tan poco tiempo, es por
ello por lo que muchos bootcamps se saltan la parte teórica para ir
directamente a la práctica con una tecnología en concreto.
Por poner un ejemplo, te enseñan que en Angular puedes escribir una clase
que llame a un backend, ponerle el atributo @Injectable()
e inyectarla en el
constructor de tu componente, pero no te explican qué es el patrón de
inyección de dependencias,
por qué estás inyectando el servicio en el constructor, ni qué aporta
hacer esto así. Simplemente te dicen “en Angular se hace así, y así se hará en
la empresa a la que vayas”.
¿Qué problema tiene esto?
El principal problema de esto es que, aunque puedes aprender a utilizar un
framework en poco tiempo, e incluso ser productivo con él, sacar las castañas
del fuego a una empresa que trabaje con él y todo eso, no profundizas en los
conceptos que hay por detrás, haciendo que su uso sea algo prácticamente
“mágico” y sin entender que está pasando por detrás. El framework se convierta
en una herramienta mágica que no sabes cómo funciona.
El día que Angular (o el framework de turno que corresponda) pase de moda y lo
usado por esas empresas sea otra cosa nueva, entonces tendrás un problema
importante para actualizarte. El día que tu proyecto requiera de una
característica que el framework no pueda resolver por sí mismo y tengas que
entrar en algo de más bajo nivel, tendrás un problema para tratar con ello. Es
un caso de un clásico refrán: pan para hoy, hambre para mañana.
Hace un tiempo tuve esta conversación por Twitter con Kony
Pyon sobre esto
mismo, la importancia de conocer lo que hay por debajo de la herramienta mágica
que usas, de forma que puedas verla “menos mágica”.
¿Pueden salir buenos programadores de los bootcamps?
Por supuesto que sí. Personalmente he conocido dos personas que les apasiona
el desarrollo, que se han formado en un bootcamp. Pero estoy bastante seguro de
que estas personas, al ser realmente apasionados, han aprendido gran parte de
los fundamentos por su cuenta. Esta gente se ha formado por sí misma mucho más
allá de los límites del propio Bootcamp.
¿Y los precios?
Ana, en su propio tweet dice que todos los bootcamps que ha visto cuestan entre
4000 € y 7000 € y que esto le parece una burrada. Esto ya depende de la
valoración de cada uno del
dinero, pero teniendo
en cuenta que te añaden a una bolsa de empleo, quizás no sea algo tan caro.
Encontrar tu primer empleo es difícil, y esta puede ser una buena forma de
acceder a él y obtener la experiencia que necesitarías para acceder a otros
puestos. Si vas a optar por esta opción, te recomendaría encarecidamente
aprender toda esa aburrida teoría que se va a saltar el bootcamp por tu propia
cuenta.
Comments
Loading comments...
Write a comment on GitHub!